El fiscal Matías Edery ordenó este miércoles una serie de allanamientos en Rosario y en Villa Gobernador Gálvez, en el marco de la investigación por el crimen de Lorenzo “Jimi” Altamirano, el músico que fue asesinado frente a la cancha de Newell’s el pasado 1 de febrero.
El asesinato, según lo que pudo determinar hasta aquí la justicia, fue contra una víctima elegida al azar, en el marco de una disputa entre facciones internas de Los Monos y la barra leprosa. Junto al cuerpo de Altamirano, sus asesinos dejaron un cartel con un mensaje mafioso. Al músico lo secuestraron cuando volvía a su casa tras un ensayo con su banda, por 27 de Febrero caminando hacia el oeste. Los últimos que lo vieron con vida fueron sus compañeros del grupo con el que tocaba. Luego fue “levantado” en la calle por un vehículo que lo llevó hasta el Coloso del Parque, para asesinarlo pocos minutos después.
A los allanamientos los realizó la Brigada Operativa de la Agencia de Investigación Criminal: uno fue en Rosario y los restantes en Villa Gobernador Gálvez. Como resultado del operativo, se detuvo a Cristian. A (34), se secuestró una escopeta, cartuchos, teléfonos celulares, dinero en efectivo, una cámara de fotos y documentación varia. También participó un grupo de irrupción del Grupo de Operaciones Tácticas.
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