El fiscal federal Federico Reynares Solari dialogó este miércoles con Radio Boing sobre el caso Cofyrco, la financiera céntrica que quedó en el ojo de la tormenta hace cuatro años con un crimen narco. Cabe recordar que el funcionario judicial solicitó la indagatoria de Patricio Carey, vinculado a la firma, buscando sumar una acusación por intermediación financiera no autorizada a la causa que ya tenía el empresario, por haber lavado dinero proveniente del narcotráfico.
“Era una cueva no autorizada por el Banco Central. Y la justicia no puede pasarlo por alto”, señaló Reynares Solari. El fiscal recordó que la investigación contra Cofyrco comenzó con la muerte de Marcelo “Coto” Medrano, que gerenciaba para la banda Los Monos los negocios de la venta de droga en la zona norte de Rosario y era también uno de los líderes de la barra de Newell’s. El 1o de septiembre de 2020, en Granadero Baigorria, el hombre fue ultimado. Y en su teléfono quedó la evidencia de que ese mismo día había ido a cambiar pesos -que se cree provenían de los búnkeres narco- por dólares en la oficina que tenía Carey en Corrientes casi Córdoba, a metros de la Bolsa de Comercio.
Aquella operación le significó a Carey la apertura de una carpeta en el MPA que deberá ser evaluada por un tribunal de la justicia federal. Pero esa elevación a juicio se complementa con el nuevo trámite que iniciaron los fiscales federales Federico Reynares Solari, Luis Argibay Molina y Javier Arzubi Calvo: en este caso, la solicitud de indagatoria fue por intermediación financiera no autorizada.
“Hace veinte o treinta años, en Rosario a una cueva iban los profesionales que habían ganado plata no declarada. Y se metían en esos lugares para no caer en un banco, pero ese dinero no venía de actividades ilícitas. Pero en el último tiempo eso cambió: en esas mismas oficinas se empezó a manejar dinero narco. Lo vimos con la causa de Rodríguez Granthon, con la que llegamos a las oficinas del financista Gustavo Shanahan que ye fue condenado. Y también con Cofyrco”, destacó Reynares Solari en charla con Gabriel Pennise en “Antes de Todo”, por Radio Boing.
Tras la declaración indagatoria de Carey, que se hizo el lunes 9, el juez Vera Barros tiene un plazo de diez días para responder si procesa al joven financista. La expectativa de pena para ambas acusaciones, en caso de sumarse este procesamiento, sería de nueve años de prisión.
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