Lionel Messi habló por primera vez como campeón del mundo tras la obtención del título máximo con la camiseta de la Selección Argentina. El rosarino se refirió a lo vivido en Qatar durante un mes entero y a las repercusiones vividas en el país.
“Fue hermoso volver de esa manera. El viaje fue larguísimo, pero veíamos que en Argentina eran las 5 de la mañana y el Obelisco ya estaba lleno de gente. No sabíamos que íbamos hacer, ahí me di cuenta que iba a ser todo una locura”, comenzó destacando.
Por otra parte, la Pulga agregó: “Fue una locura estar en ese colectivo. Podíamos ver la felicidad de la gente. Grandes, chicos, de todas las edades, la felicidad era inexplicable. Lo mejor de todo fue como se comportó la gente porque hubo cinco millones de personas y no pasó nada”.
“La gente que estaba en el Obelisco entendió que era imposible llegar con el colectivo hasta ahí. La gente era consciente de que queríamos ir, pero no se podía. La alegría que había hizo que no importara nada más”, sostuvo.
Con respecto a lo vivido arriba del colectivo que los paseó por Buenos Aires como campeones, el rosarino rememoró: “Algunos empezaron a tomar fernet, otros vino. Arriba del micro no nos dábamos cuenta del calor que hacía, el sol no se sentía tanto pero a la noche ya estaba todo todo flechado, con dolor de cabeza”.
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