El agente de la Policía Comunitaria de la Unidad Regional II acusado por el asesinato de Nicolás Cano en Campbell al 600 fue imputado por homicidio y quedó en prisión preventiva. El uniformado fue señalado por balear al joven de 26 años en la cabeza mientras este protagonizaba una discusión con su padre.
El fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos Adrián Spelta indicó que el suboficial perpetró el homicidio doloso simple agravado por el uso de arma de fuego en grado consumado y en carácter de autor. Por ese motivo, la jueza Silvana Lamas aceptó esa acusación y dictó prisión preventiva efectiva por el plazo de 90 días.
Según pudo reconstruir la investigación, el policía arribó a la zona de Campbell y Juan José Paso tras un llamado al 911 en el que se denunciaba “un altercado familiar con dos hombres”. En ese momento, se dirigió a separar a la víctima y a su padre, quienes protagonizaban una discusión y se encontraban a punto de trenzarse a golpes de puño.
En ese momento, el agente policial habría tomado un arma de fuego subfusil FMK-3 provisto por la armería central, y disparado en la cabeza a Cano. El joven murió horas después en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez.
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