Javier Milei planea sortear su primer sueldo como Diputado entre la gente. Después de leer la noticia, una sonrisa se me dibujó en el rostro de forma espontánea. ¿Puede un legislador sortear su sueldo y así cometer un acto demagógico sin más? Totalmente.
En otros países sería un acto puramente proselitista, pero en Argentina este gesto esconde un simbólico mensaje de gran profundidad. En un territorio al que parte de sus ciudadanos define como inviable, imposible o insalvable, y prefieren apagar la luz en un sálvese quien pueda, estas acciones resultan inspiradoras para quienes creemos que los que nos gobernaron los últimos 70 años nos deben explicaciones.
Lejos de estar ungidos por privilegios o posiciones intocables, deberían ser administradores de perfil bajo que concurren en bicicleta a sus puestos de trabajo. El desarrollo de la humanidad siempre estuvo marcado por grandes gestos que la inspiraron y eso es parte de lo que necesitamos para salir adelante.
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