“Este 2026 va a ser un gran año para Rosario. Vamos a recuperar algo de lo mejor de nuestra esencia: el sector privado comprometido con el futuro de la cultura de la ciudad”, sñeló Javkin este lunes en la Bolsa de Comercio de Rosario, en el marco de la presentación de la propuesta para ampliar el Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino + Macro. La obra permitirá ampliar en 1.500 metros cuadrados la estructura del histórico edificio y será financiada integramente por el sector privado.
Los trabajos son parte de las obras del Tricentenario de Rosario y serán un paso clave para consolidar uno de los centros culturales más emblemáticos de la ciudad. El monto de inversión rondará los 2 millones de dólares, aportados por más de veinte empresas e instituciones de la ciudad.
La ampliación contempla: Nuevas áreas de guarda y conservación bajo estándares internacionales; salas de exposición con mayor dimensión y altura, que permitirán enriquecer la oferta de muestras; espacios educativos, auditorio y servicios para el público. La nueva área se llamará “El Zócalo”, respetando el edificio histórico diseñado por Hilarión Hernández Larguía e integrando el museo al parque con terrazas verdes y nuevos espacios públicos. Según señaló esta mañana Javkin en conferencia de prensa en el edificio de la Bolsa de Comercio, el proyecto ejecutivo ya está listo, los aportes ya comenzaron a realizarse y el objetivo es terminar los trabajos en 2026, idealmente hacia diciembre.
Entre los donantes que adquirieron un “ladrillo del Tricentenario” para financiar la obra se encuentran empresas como la Bolsa de Comercio de Rosario, Dycon, Obring, Sancor Seguros, John Deere y la Fundación Castagnino. La Fundación del Banco Municipal será la encargada de administrar el fideicomiso especialmente creado para garantizar la transparencia, eficiencia y control de los aportes. En sus orígenes, el Castagnino fue donado a la ciudad hace casi 90 años por Rosa Tiscornia de Castagnino en memoria de su hijo Juan Bautista, coleccionista de arte. Desde entonces, ha sido un símbolo de cooperación cultural en Rosario.
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