Con el acompañamiento de aliados provinciales, la Unión Cívica Radical, el PRO y tres senadores peronistas, La Libertad Avanza consiguió este viernes la sanción definitiva del Presupuesto Nacional 2026, tras un extenso debate de casi ocho horas en el Senado. La iniciativa fue aprobada por 46 votos a favor, 25 en contra y una abstención, y se convirtió en el primer plan de gastos y recursos sancionado durante la gestión de Javier Milei.
La votación en particular comenzó a las 21.12 y estuvo marcada por la fuerte tensión en torno al Capítulo II, que incluía el artículo 30, cuestionado por el peronismo y sectores de la UCR por derogar normas que garantizan el financiamiento de la educación, la ciencia y la defensa. Pese a los rechazos anticipados, el oficialismo logró imponerse y despejar el camino hacia la sanción definitiva de la denominada “ley de leyes”.
Durante toda la sesión, el Gobierno mantuvo negociaciones contrarreloj para evitar modificaciones que obligaran a devolver el texto a la Cámara de Diputados. En ese marco, tuvieron un rol clave el ministro del Interior, Diego Santilli, quien se hizo presente en el Congreso, y la jefa del bloque oficialista en el Senado, Patricia Bullrich, encargada de consolidar los apoyos desde la llegada del proyecto a la Cámara alta.
Para la Casa Rosada, la aprobación del Presupuesto representa una señal política y económica central, tanto hacia el Fondo Monetario Internacional como hacia los mercados. Milei gobernó sus dos primeros años con la prórroga del Presupuesto 2023 y, tras la media sanción en Diputados del pasado 17 de diciembre, había anticipado que no vetaría la norma, aun cuando el texto perdió un capítulo clave para el oficialismo.
En la Cámara baja, La Libertad Avanza había quedado sin el Capítulo XI, que incluía el artículo 75 y proponía derogar las leyes de Emergencia en Discapacidad y de Financiamiento Universitario, lo que generó un amplio rechazo opositor. En el Senado, en cambio, el oficialismo logró sostener su estrategia y también se impuso para que la votación se realizara por capítulos y no por artículos.
Tras la aprobación del Capítulo I, el senador Jorge “Coqui” Capitanich solicitó que el artículo 30 se vote de manera nominal, pero el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala —quien quedó a cargo tras el retiro de Victoria Villarruel luego de la votación en general— rechazó el planteo al recordar que ya se había definido el mecanismo de votación.
La senadora Anabel Fernández Sagasti presentó entonces una cuestión de privilegio y denunció una “violación abierta del reglamento”. “Queremos saber quiénes levantan la mano contra la educación pública, la ciencia y la tecnología”, sostuvo la mendocina, al tiempo que calificó el artículo como una “declaración contra la educación pública” sin relación con el déficit cero.
Finalmente, el Capítulo II fue aprobado con 42 votos positivos de La Libertad Avanza, el PRO, la mayoría de la UCR y bloques provinciales. Los rechazos sumaron 28 votos, correspondientes al interbloque peronista-kirchnerista, con excepción de tres senadores del bloque Convicción Federal: Guillermo Andrada (Catamarca), Sandra Mendoza (Tucumán) y Carolina Moisés (Jujuy), quienes también acompañaron el proyecto en general y en el resto de los capítulos.
En tanto, tres senadores radicales —Maximiliano Abad, Flavio Fama y Daniel Kroneberger— se sumaron al rechazo del Capítulo II, mientras que se registraron dos abstenciones: la neuquina Julieta Corroza y la cordobesa Alejandra Vigo, quien había sido la única en abstenerse también en la votación en general.
Con la sanción del Presupuesto 2026, el oficialismo cerró una sesión clave de las extraordinarias y consiguió una victoria política central para el rumbo económico del Gobierno de Javier Milei.
La primera victoria del oficialismo fue lograr que se vote por capítulos

Con fuerte expectativa política, el Senado inició este viernes a las 12.18 una sesión extraordinaria clave, en la que se debate el Presupuesto Nacional 2026 y el proyecto de Inocencia Fiscal, dos iniciativas centrales para el Gobierno.
Antes de comenzar el tratamiento de la denominada “ley de leyes”, el recinto debió resolver una controversia reglamentaria surgida en la reunión de Labor Parlamentaria, donde no hubo acuerdo sobre la modalidad de votación en particular del Presupuesto. El oficialismo propuso que se vote capítulo por capítulo, tal como ocurrió en la Cámara de Diputados, mientras que el interbloque peronista impulsaba una votación artículo por artículo.
Ante la falta de consenso, fue el pleno del Senado el que definió el mecanismo de votación, reproduciendo el mismo escenario registrado ocho días atrás en la Cámara baja. En esa oportunidad, el oficialismo logró imponerse por 39 votos a favor y 33 en contra, habilitando la votación por capítulos.
La decisión generó una fuerte reacción del interbloque conducido por José Mayans, que cuestionó la validez de la moción y sostuvo que para imponer ese criterio se requería una mayoría especial de dos tercios del Cuerpo, y no una mayoría simple.
En ese marco de tensión política y reglamentaria, el Senado avanza con el tratamiento del Presupuesto 2026, una de las discusiones más relevantes del año legislativo, y con el análisis del proyecto de Inocencia Fiscal, que también despierta posiciones encontradas entre los distintos bloques.
Comentarios