En el marco del primer juicio por jurados realizado en los tribunales de Reconquista, Bruno Luis Martínez fue declarado culpable y condenado a prisión perpetua por el femicidio de la hija –de apenas tres años– de quien era su pareja.
El veredicto fue resuelto por unanimidad por los doce ciudadanos que integraron el jurado popular, tras una deliberación secreta de dos horas. Una vez comunicada la decisión, se llevó a cabo la audiencia de cesura, donde la jueza Claudia Bressán impuso la pena de prisión perpetua, tal como lo habían solicitado la fiscal Georgina Díaz y el fiscal Valentín Hereñú, representantes del Ministerio Público de la Acusación (MPA).
Martínez, de 24 años, recibió la máxima condena por la autoría del delito de homicidio calificado por ensañamiento, por alevosía y por haber sido cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género, figura que define legalmente el femicidio.
Un juicio histórico en la provincia
Este debate oral bajo el sistema de jurados populares fue el cuarto realizado en la provincia de Santa Fe, luego del llevado adelante en San Cristóbal y otros dos desarrollados en la ciudad de Santa Fe. Para los fiscales, el proceso dejó una valoración positiva.
“Valoramos el compromiso con el que los ciudadanos que integraron el jurado asumieron la responsabilidad que implica formar parte de un juicio de estas características”, destacaron Díaz y Hereñú.
Además, subrayaron “la importancia de que el jurado haya decidido condenar al acusado con la misma calificación y los mismos agravantes que solicitamos en nuestros alegatos”.
Un crimen atravesado por violencia extrema
Según la investigación fiscal, el femicidio ocurrió entre las 8:00 y las 13:00 del lunes 8 de enero de 2024, en una vivienda del asentamiento oeste del barrio Guadalupe, en Reconquista. La víctima tenía solo tres años.
Los fiscales detallaron que Martínez actuó en un contexto de dominación sobre la niña y ejerció violencia con un único propósito: incrementar su sufrimiento.
“El condenado la golpeó deliberadamente para provocarle cada vez más dolor”, afirmaron.
“Actuó sobre seguro, a sabiendas del estado de indefensión propio de cualquier niña o niño pequeño”, agregaron.
La autopsia confirmó que la víctima sufrió un traumatismo de cráneo grave producto de los golpes, lesión que derivó en su muerte al día siguiente.
Comentarios