
Luego de la exitosa cirugía a la que fue sometida por un cuadro de apendicitis aguda con peritonitis localizada, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner evoluciona favorablemente, aunque continuará internada bajo observación médica.
Según el nuevo parte médico, a la ex mandataria se le practicó una tomografía computada de abdomen que “confirma el diagnóstico” establecido al momento de su internación en el Sanatorio Otamendi, en la Ciudad de Buenos Aires.
El informe detalla que “se implementaron las medidas de soporte correspondientes esperando la resolución del cuadro” y precisa que la paciente “continúa bajo tratamiento antibiótico endovenoso y drenaje peritoneal”, al tiempo que aclara que “no presenta fiebre hasta el momento”.
Asimismo, el parte agrega que “se mantiene la indicación de internación hasta la resolución del cuadro”, por lo que Cristina Kirchner permanecerá hospitalizada mientras continúe su evolución clínica.
La dirigente cumple actualmente una condena de prisión domiciliaria, confirmada en su momento por la Corte Suprema de Justicia. No obstante, obtuvo autorización judicial para salir de su residencia en el barrio porteño de Constitución y recibir atención médica inmediata en el Sanatorio Otamendi, dada la gravedad del cuadro de salud informado por los profesionales que la asistieron.
De acuerdo a lo informado, la ex presidenta solicitó asistencia médica a domicilio tras sufrir fuertes dolencias en la zona abdominal. El personal de salud que la evaluó determinó que, por la intensidad y características de los síntomas, era necesario su traslado a un centro de mayor complejidad para la realización de estudios y la posterior intervención quirúrgica.
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