Las semifinales del primer Grand Slam del año estuvieron a la altura de la circunstancia, con dos partidos que cumplieron con las expectativas previas. Por primera vez en los últimos cinco años en los que estuvo presente -recordando que en el 2022 no participó por no estar vacunado contra el coronavirus- Novak Djokovic no estará en la final.
La gran sorpresa de la jornada se dio durante la madrugada de este viernes, cuando Jannik Sinner eliminó al 1 del mundo en cuatro sets. Para ejemplificar la importancia de esta victoria hay que tener en cuenta un dato sobre el serbio: había ganado las anteriores once semifinales que había disputado en territorio oceánico.
El italiano es uno de los máximos referentes que tiene la nueva camada de tenistas y lo demostró en Australia al derrotar a Nole por 6-1, 6-2, 6-7 (6) y 6-3. Sinner llegó a la final tras dejar en el camino a Botic van de Zandschulp, Jesper De Jong, Sebastián Báez, Karen Khachanov, Andrey Rublev y a Novak Djokovic.

En la otra semifinal, y en un partido maratónico, el ruso Daniil Medvedev se impuso en más de cuatro horas de juego en uno de los cruces más recordados de esta edición del campeonato. Es la segunda vez que disputará la final del Australian Open tras haber sido subcampeón en las ediciones del 2021 y 2022, cuando cayó ante Nole y Rafa Nadal respectivamente.
Medvedev logró reponerse después de perder los primeros dos sets ante Alexander Zverev y lo terminó derrotando por 5-7, 3-6, 7-6 (4), 7-6 (5) y 6-3. “Estaba un poco perdido, pero me dije que si quedaba eliminado lo haría estando orgulloso. Me propuse pelear y gané. Estoy orgulloso”, declaró después del partido que duró exactamente cuatro horas y 18 minutos. Disputará el duelo decisivo tras ganarle a Terence Atmane, Emil Ruusuvuori, Félix Auger-Aliassime, Nuno Borges, Hubert Kurkacz y a Alexander Zverev.
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El encuentro se disputará este domingo, con transmisión de ESPN 2 y Star+.

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