El juez Hernán Postma dictó 90 días de prisión preventiva para los empresarios Juan Carlos Guardati y Ángel Torti tras una audiencia de cuatro horas en el Centro de Justicia Penal, con presencia de los imputados que habían sido detenidos el miércoles en sus domicilios, en el marco de una investigación de los fiscales Sebastián Narvaja y Miguel Moreno, de la Unidad de Delitos Económicos del MPA.
Lo que detectaron los fiscales fue que la semana pasada, Guardati y Torti habían firmado dos convenios con sendos acreedores del concurso que transita la firma desde enero de 2020, cuando dejó sin respuesta a más de 150 ahorristas que habían abierto cuentas comitentes en la empresa GyT y cuyos fondos desaparecieron de un día para el otro.
Entre el público hoy estaban los familiares de ambos empresarios. Por la querella, sólo estaban los abogados de los ahorristas. No obstante, la causa por la que fueron detenidos Guardati y Torti no fue aquella de enero de 2020, sino el hecho de haber firmado esta última semana dos convenios con acreedores, con los cuales buscaban comprar su voto favorable en el concurso.
El fiscal Narvaja fue quien presentó la imputación. Refirió a dos hechos de elusión en concurso real en grado de coautores, por dicho convenios firmados con acreedores. Esos documentos establecían claramente que el pago de GyT se iba a dar a cambio de votar favorablemente en el concurso. La defensa pidió invalidar evidencia en el comienzo de la audiencia, pero el juez Postma desestimó la solicitud.
Uno de los que firmó convenio, el pasado 6 de junio, fue un acreedor de apellido Delgado. “Él se ve despojado de 17 millones de pesos desde enero de 2020, que estaban bajo custodia de GyT. La empresa agarró su plata y la usó para otra cosa. Y cuando Delgado reclamó, le dieron un cheque que sabían que no iban a poder pagar. Por estos hechos fueron imputados Guardati y Torti, por administración fraudulenta. Delgado es víctima de un fraude y querellante”, sostuvo Narvaja.
Durante la audiencia, el doctor Claudio Puccinelli fue quien tomó la voz por los imputados. Mencionó sus edades avanzadas y habló de que no entorpecerían el curso de la investigación. También dijo que si no los hubiesen detenido, igual se habrían presentado ante la justicia.
El juez Postma razonó en el cierre: “La materialidad está probada. Este tipo de hechos no son de compleja investigación. Y más allá del gran trabajo que hizo la defensa en esta audiencia, no hay elementos desincriminantes”.
Por otra parte, recordó que había condiciones fijadas por otro juez para la libertad de Guardati y Torti, que fueron violentadas: “Lo que dictó el doctor Negroni el 1 de febrero de este año era una libertad provisional, con condiciones. Esas libertades caducan cuando el imputado incurre en un nuevo delito penal. Por eso deben caducar esas libertades y de la medida oportunamente dictada”.
Luego aclaró: “Ahora bien, ahora debemos hablar sobre la proporcionalidad y las escalas penales. Suponiendo que se tome la mínima de 8 años como planteó la defensa, es totalmente probable que de confirmarse una condena, la pena sea de cumplimiento efectivo. Estamos hablando de un concurso real de delitos. Se discrepa si es de más de 150 hechos o uno solo. Pero son delitos graves. La tercera cuestión es la peligrosidad: tenemos ya de por sí un delito de administración fraudulenta. Y lo que se ha sumado aquí con estos dos convenios, que no son legales, son acciones delictivas de gravedad, que podían obstaculizar a la justicia civil que está llevando adelante el concurso. Y qué se producen cuando los imputados estaban con alternativa a la prisión preventiva”.
Finalmente, el juez decidió la prisión preventiva por 90 días. Y respecto al pedido que hizo la defensa por la salud y la edad de los imputados, informó que se solicitará la participación de los equipos médicos de la justicia para evaluar qué tipo de tratamiento médico necesitan.
En el caso de Juan Carlos Guardati, fue él mismo quien reconoció antes del cierre de la audiencia y que el juez comunique la medida cautelar, que padece una enfermedad que requiere en poco tiempo una intervención quirúrgica compleja.
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