En el Palacio Vasallo se hará oficial en las próximas semanas la incorporación de las ciclovías temporarias a la red permanente de Rosario. Por otro lado, comenzará la discusión sobre alternativas para dar solución a la problemática de las bicicletas en el cantero central del Bv. Oroño, lugar donde se encuentran prohibidas pero las autoridades de control no logran evitarlas.
En 2020, con la llegada de la pandemia, se realizaron nuevas trazas con el objetivo de desalentar la circulación en colectivos, y además, acercarse a la concreción al Plan Local de Acción Climática.
En el año 2011 se elaboró el Plan Integral de Movilidad de Rosario, donde se definieron los lineamientos “para conseguir un modelo de movilidad que optimice los desplazamientos, mejore la calidad de vida, favorezca el desarrollo económico, promueva la inclusión social e incentive los modos de transporte sustentables”. Los mismos “fueron revalidados durante los años 2020 y 2021, donde luego de un proceso participativo, se diseñó el Plan Local de Acción Climática Rosario 2030 que incluye, entre sus metas, para el 2025 completar la red de ciclovías planificada alcanzando los 300 km de recorrido y otorgando cobertura como mínimo a los 6 distritos de la ciudad, mientras que para el año 2030 aumentar la participación modal de la bicicleta hasta un 15% e incorporarla como modo complementario de viaje para fomentar la multimodalidad”.
En ese marco, el concejal del espacio CREO Fabrizio Fiatti presentó un proyecto para que se sumen las 25 nuevas vías creadas en los últimos dos años de manera provisoria. “El Plan Local de Acción Climática prevé alcanzar los 300 kilómetros en la ciudad. Actualmente contamos con 202 kilómetros entre las definitivas y las temporales, que son 56 kilómetros aproximadamente. Esos 56 kilómetros en su momento, en el año 2020, cuando habilitamos la opción desde el Concejo Municipal, representaron un 40, casi 50% del total de la infraestructura existente, y en este momento están alrededor del 25%”, dijo el edil a RedBoing.
Y añadió: “En todos los casos, las arterias que tuvieron ciclovías temporarias incrementaron la participación relativa de las bicicletas en un porcentaje muy alto. Ninguna tenía, sin bicisendas, más del 1 o 2 por ciento de uso de bicicleta, con la infraestructura llegaron a más del 10. A su vez también las temporarias sirvieron para marcar la extensión del sistema de bicicletas públicas. Además, se sumaron estaciones de bicicletas nuevas. Estamos en 79 actualmente. En marzo de 2020 había 50. ¿Dónde se localizaron? Siguiendo el trazado de las bicisendas”.
Por otro lado, la problemática de las bicicletas en el cantero central de Bv. Oroño sigue sumando capítulos. Por ese motivo, en las últimas horas el concejal de Juntos por el Cambio Carlos Cardozo presentó un proyecto para generar nuevas vías paralelas a la arteria y descomprimir así su uso.
“Queda claro que con cartelitos no alcanza para evitar que eso suceda, por eso insistimos en que se cumpla la ordenanza de 1999 (24 años) de colocar barandas disuasorias en las esquinas, que dificulten el paso de bicis, skates, longboards y ahora monopatines eléctricos pero que no impidan el paso de personas con discapacidad o cochecitos de bebés”, dijo a RedBoing el legislador y precandidato a intendente por Unidos para Cambiar Santa Fe.
Si bien para Cardozo “sería loable avanzar sobre la prohibición de estacionar sobre Oroño y poner allí las ciclovías, sin lugares para dejar los autos y con escuelas, sanatorios, centros de diagnóstico, etc. hoy es inviable”. Por eso “proponemos que se hagan en Alvear desde Pellegrini a Salta, levantando una mano del estacionamiento doble, y sobre Balcarce (corriendo las líneas del TUP a las paralelas) en el otro sentido”.
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