El Gobierno de Austria tomó una drástica decisión: confinar a las personas que no se han vacunado. Así lo informó el canciller Alexander Schallenberg ante el avance de esta nueva ola. Debido a que este miércoles se registró el récord de casos diarios cuando se reportaron 11.398 nuevos contagios en 24 horas.
Esta cifra superó el último máximo de 9943 casos, registrado el sábado pasado en el país de 8,9 millones de habitantes. Schallenberg tomó la decisión ante el “vergonzoso” nivel de vacunación completa en Austria, que ronda el 65% de la población y es uno de los más bajos de Europa. Las regiones de Alta Austria y Salzburgo ya anunciaron el aislamiento estricto de los no vacunados, aunque sin detallar de qué forma se aplicará.
Una gran cantidad de austríacos son escépticos respecto de las vacunas, una opinión alentada por el Partido de la Libertad de extrema derecha, el tercero más grande en el Parlamento austríaco. “Daremos este paso ahora y mi deseo es que lo hagamos el domingo a nivel nacional para las nueve provincias”, aseguró el canciller federal.
Schallenberg explicó que quienes no estén completamente vacunados enfrentarán las mismas restricciones en sus movimientos diarios que todo el país sufrió durante los tres confinamientos del año pasado. Su intención es evitar que se repitan tales restricciones en toda la población, pero fomentar la vacunación de aquellas personas que se resisten a recibir la vacuna.
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