El Gobierno nacional analiza convocar a una extensión de las sesiones extraordinarias para el lunes 2 de febrero, con el objetivo de retomar el tratamiento de los proyectos pendientes, entre los que se destacan la reforma laboral y la iniciativa vinculada a glaciares.
Ambas propuestas forman parte del temario enviado en diciembre al Congreso, en el marco de las extraordinarias que rigieron entre el 10 y el 30 de ese mes. Sin embargo, el oficialismo no logró avanzar con algunos de los textos debido a la falta de consensos necesarios para su aprobación.
En el caso de la denominada “modernización laboral”, impulsada por la Casa Rosada y resistida por sectores del sindicalismo, el tratamiento debió ser postergado ante la ausencia de los votos suficientes para sancionarla. La expectativa del Ejecutivo es que, ya entrado febrero, se pueda destrabar el escenario político y parlamentario.
En ese marco, se espera que Patricia Bullrich, en su rol de jefa del bloque de senadores libertarios, avance en la construcción de acuerdos para aprobar la reforma, considerada una de las prioridades del oficialismo para la segunda mitad del mandato. Bullrich contará con el respaldo de referentes de la Casa Rosada como Diego Santilli, Eduardo “Lule” Menem y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem.
Vale destacar que quedó descartada la posibilidad de sesionar durante enero, por lo que el 2 de febrero aparece como la fecha tentativa para retomar el debate parlamentario.
La reforma laboral se convirtió en una verdadera obsesión para el presidente Javier Milei, quien la considera una pieza central de su programa de gobierno. Desde el Ejecutivo sostienen que la iniciativa permitiría impulsar las contrataciones en el sector privado y avanzar en una mayor flexibilización del mercado de trabajo.
En contraste, la reforma del Código Penal no será tratada durante las sesiones extraordinarias, debido a la complejidad y extensión del proyecto, que demandará meses de discusión en el ámbito legislativo.
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