Graciela Fernández Mejide, política y activista por los derechos humanos argentinos, opinó sobre la Causa Vialidad en la que el fiscal Diego Luciani solicitó 12 años de prisión para la vicepresidenta Cristina Kirchner y la inhabilitación de por vida para ocupar cargos públicos.
En diálogo con Gabriel Pennise, la ex integrante de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP) afirmó que “la investigación a cargo del fiscal Luciani me hizo acordar, salvando las distancias, a cómo ví que trabajaba el equipo de Julio Strasera y Luis Moreno Campos previo al juicio a las Juntas”, con quienes operó codo a codo.
En ese marco, destacó la declaración que realizaron en las últimas horas desde el Club Político Argentino “diciendo que es una barbaridad que se intente recurrir a ocupar las calles para que la Justicia no funcione”. En Antes de Todo de Radio Boing criticó también “el apoyo de personajes centrales del Gobierno”, quienes “deberían estar trabajando por la independencia de la Justicia”.
“Durante estos tres años de investigación se sumaron datos para poder presentar ante los jueces. Los Fiscales, quienes acusan en nombre del pueblo, han presentado pruebas impecables. De acá en más la Justicia deberá revisar los expedientes y el alegato para determinar si se aplicará alguna condena”, atendió Fernández Mejide.
Respecto a la posibilidad de que Cristina Kirchner sea condenada en la Causa Vialidad, la ex ministra de Desarrollo Social durante el gobierno de Fernando De La Rúa, expresó: “Me da confianza el enojo y el extremismo que puso la vicepresidenta para oponerse. Todo el paseo que hizo ayer en su defensa se basó exclusivamente en echarle la culpa a autores intelectuales en un gobierno que eran ellos”.
“La única estrategia que están usando, además del apriete, es decir ‘¿de qué me vienen a hablar, en la política hay corrupción?’. Se disculpa diciendo que están todos en el barro”, disparó.
“Tengo la impresión de que no han logrado sacudir a todas sus fuerzas, porque sino ayer hubiera habido una gran manifestación. Creo que todo el peronismo, salvo algunos fanáticos, ya descreen y no hay cómo juntarlos. Por eso están pensando en el 17 de octubre, para ver cómo se combinan”, añadió. Y concluyó: “En la apariencia todos la apoyan, pero cuando se habla en privado algunos la detestan”.
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