Tras la convocatoria del Ministerio de Salud a una nueva instancia del Examen Único de Residencias por sospechas de fraude, se confirmó que ninguno de los 117 aspirantes que se presentaron este martes logró revalidar la calificación obtenida en la primera evaluación. Del total, 109 son médicos extranjeros.
La prueba fue organizada tras detectarse posibles maniobras irregulares en la evaluación realizada el pasado 1 de julio en Parque Roca. De los 141 postulantes citados por haber obtenido resultados inconsistentes con su historial académico, se presentaron 117.
El examen fue llevado adelante bajo estrictas medidas de seguridad en el Palacio Libertad. No se permitió el ingreso de dispositivos electrónicos como celulares, relojes inteligentes, calculadoras ni anteojos digitales. Además, todo movimiento dentro del aula fue supervisado por personal del Ministerio y efectivos de seguridad.
La nueva prueba constó de 100 preguntas de opción múltiple sobre salud infantil, salud de la mujer, del adulto y salud pública, con una duración máxima de cuatro horas. Las respuestas fueron corregidas directamente sobre la grilla entregada por cada postulante al finalizar el examen.
La segunda instancia fue convocada tras una denuncia penal presentada por el Ministerio de Salud, donde se detallaba que al menos un médico habría utilizado anteojos con cámara integrada para grabar el contenido del examen. Según la investigación, el aspirante habría salido del aula para enviar las imágenes captadas, recibió las respuestas por medios tecnológicos y luego completó la prueba con esa información. También se detectaron grupos pagos en plataformas como Telegram y WhatsApp, donde se vendían resoluciones, y se utilizaron auriculares y otros dispositivos electrónicos para facilitar el fraude.
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