Todas las selecciones que formarán parte de la próxima Copa América se vieron obligados a presentar una prelista de convocados, en la que tuvieron la posibilidad de incluir hasta 55 jugadores. De estos saldrán los 23 futbolistas que representarán a cada uno de los equipos en la competencia continental que se disputará en Estados Unidos desde junio. Entre todos los nombres que se mencionaron, hubo uno en particular que llamó la atención en Chile.
Ricardo Gareca, entrenador del combinado trasandino, incluyó dentro de la nómina a un jugador argentino que se encuentra siendo figura en la liga local chilena, pero que es noticia por una cuestión extrafutbolística. El nombre en cuestión es Luciano Cabral, que juega para Coquimbo Unido y que hace 7 años fue condenado por homicidio y actualmente está en libertad condicional.
Cabral nació en la localidad mendocina de General Alvear, y debutó de manera profesional en 2013 en Argentinos Juniors. Después de tres años con la camiseta del Bicho, el mediocampista continuó su carrera a préstamo en Athletico Paranaense. No obstante, en 2017 interrumpió su contrato por la situación criminal a la que se lo vinculó.
En la madrugada del Año Nuevo de 2017, Cabral se encontraba en su General Alvear local cuando se lo vinculó junto con su padre y uno de sus primos con un homicidio en la calle producto de una pelea. Sus dos familiares fueron detenidos por las autoridades locales, y el futbolista se entregó a la policía. Tras esto, fue declarado culpable como coautor de asesinato, a pesar de que Luciano Cabral se adjudica la inocencia y que él no tuvo vínculo con el homicidio.

A pesar de las intenciones del Tigre de poder contar con él en el seleccionado chileno, primero tendrá que tener una autorización judicial teniendo en cuenta que tiene que continuar con la condena por el crimen.

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