La NASA comprobó que fue golpeado por un meteorito hace un año. Fue el 24 de diciembre, cuando el módulo de aterrizaje InSight sintió temblar el suelo de una forma diferente y registró un “Marsismo” de magnitud 4. Los científicos, tras una investigación, determinaron que fue a causa del impacto de una piedra rocosa y no de un movimiento telúrico del mismo planeta.
Los investigadores determinaron el impacto del meteorito luego de ver las imágenes de la sonda Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) de la NASA que orbita Marte. De esta forma, se puede ver el cráter que dejó.
Según lo que confirmó la agencia espacial de Estados Unidos manifestó que es uno de los más grandes vistos desde que comenzaron a explorar el cosmos. Además, el impacto extrajo trozos de hielo del tamaño de una roca enterreados cerca del ecuador marciano.
Se estima que el pedazo de roca medía de 5 a 12 metros. Es lo suficientemente pequeño como para haberse quemado en la atmósfera de la Tierra pero no en la de Marte. El impacto fue cerca de una región Amazonis Platinia y abrió un cráter de 150 metros de ancho y 21 de profundidad.
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