Cuando comenzó el partido con Quilmes por Copa Argentina, se notaba un hueco en el medio de la popular que ocupa en Córdoba la parcialidad canalla. La barra recién llegó a los 25 minutos del primer tiempo.
Luego en el entretiempo se conocieron los motivos, cuando empezaron a circular por las redes las fotos de un arsenal de pirotecnia, también varias botellas de Fernet y cajas de vino, que se habían incautados por la policía cordobesa de uno de los colectivos en los que viajaba la hinchada.
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