La medianoche del lunes será el momento señalado para que las canceladoras de los colectivos que conforman el Transporte Urbano de Pasajeros de Rosario den un nuevo salto en sus tarifas, el segundo en los cinco meses que van de 2022. El intendente Pablo Javkin, por medio de las facultades que le brindara el Concejo local en noviembre de 2020, habilitó la suba a $69,50 luego que el estudio de costos del Ente de la Movilidad indicara que el boleto debía estar en $105,60 con los 360 mil viajes diarios que se llevan a cabo.
El análisis que llevó a que el pasaje dé un salto cercano al 17% cuenta con varias aristas. Luego de casi tres semanas con amenazas de paros por parte de los choferes nucleados en la UTA Rosario, los empresarios dieron el visto bueno para una actualización salarial escalonada. En ese marco, adelantaron que sería necesario cobrarle más dinero a los pasajeros.
“Este estudio de costos comprende un aumento del combustible de un 20% y la paritaria firmada del 21%. De todos modos, hay que considerar que esta es una primera parte del incremento salarial porque quieren llegar a un 50%”, indicó en diálogo con RedBoing el concejal de Juntos por el Cambio Charly Cardozo. En lo que va de 2022 los precios de la nafta y del gasoil sufrieron tres aumentos, empujando el resto de los costes hacia arriba y acrecentando la suba inflacionaria que se mantiene desde años en la Argentina.
Fuentes municipales apuntaron que “el nuevo valor del boleto será por debajo del proceso inflacionario que atraviesa el país y a pesar de la aún no resuelta inequidad en la distribución de los subsidios nacionales en relación con el AMBA”. “La diferencia con los $105,60 (lo que debería valer el boleto según el estudio de costos), será absorbida por los municipios y las empresas”, añadieron.
El aumento en el valor del boleto de colectivos repercutirá en la tarifa del sistema Mi Bici Tu Bici, ya que se encuentra atado al mismo. De este modo, el abono diario pasará a costar $84,78. El sistema de alquiler de bicicletas públicas nació en diciembre de 2015, con 150 viajes en un día y 18 estaciones repartidas por la ciudad. Casi 7 años después, el plan se ha extendido a más de 3.700 viajes diarios y 72 “Bici bases”. En aquel entonces, fue pensado con un costo de un boleto y medio de colectivos, valiendo en abril de 2015, $9,45.
Claro está, en ese ejercicio subir al colectivo en Rosario costaba $6,30. Desde ese tiempo a la fecha, los rosarinos debieron abonar cada vez más dinero por un servicio que no sufrió grandes mejoras.
En febrero de este año, Javkin también autorizó un aumento en el precio del boleto del Transporte Urbano de Pasajeros. En el marco de la Emergencia votada en el Palacio Vasallo, la intendencia podía hasta noviembre de este año disparar dos subas anuales. Al llevarlo de $49,50 a $59,35 en ese momento y ahora a $69,50, el costo quedará fijo por lo que queda del año.
Cuando se lanzó el nuevo sistema de transporte en 2019 se hablaba de la necesidad de contar con los 880 colectivos para cubrir el flujo rosarino. No obstante, jamás se alcanzó esa cifra en las calles, con un corte de boleto que rondaba los 550 y 600 mil pasajeros diarios. Según indicó el intendente cuando hizo el anuncio de la nueva reestructuración, desde el lunes pasado, la ciudad tiene 632 coches en las calles. “En algún momento nos planteamos el objetivo de tener 700, que alguna cumpliremos en el futuro, pero en la proporción de pasajeros que tenemos será un índice superior al que teníamos en la prepandemia”, expresó. Un informe del Observatorio Social del Transporte (OST) apuntó que en invierno de 2019 el sistema tenía 691 coches.
Por otro lado, el recurso de los taxis se vuelve cada vez menos accesible para los ciudadanos. La falta de móviles y su alto costo son dos de las razones que han bajado a los rosarinos de los autos negros y amarillos. Actualmente, Rosario cuenta con 3.862 coches en funcionamiento.
El último 9 de mayo cerró la inscripción para las 500 nuevas chapas que serían entregadas por el Municipio. No obstante, no se llegó a cubrir ese cupo a pesar de la flexibilización de las condiciones, que elevó la antigüedad máxima de los vehículos e incrementó las cuotas para pagar la licencia. Finalmente fueron 457 los anotados, a los que aún les quedan varias instancias administrativas para recibir el ‘OK’ y comenzar a circular.
En tanto, el Concejo autorizó a principios del mes una suba en la tarifa, que llevó todo un 35% hacia arriba. A pesar de que el estudio de costos señalaba que se encontraba atrasada en casi un 82%, entre los distintos bloques y las Cámaras acordaron ese incremento. Días más tarde, la Intendencia firmó que la bajada de bandera diurna se fuera a $177,20 y a $8,40 la ficha; y $207,10 la bajada de bandera y $9,50 la ficha en la noche.
Una vez más, el servicio se encareció para el bolsillo de los rosarinos pero no consiguió cubrir sus necesidades. La inflación como la máxima culpable de los aumentos y la inequidad del Estado Nacional a la hora de repartir los subsidios como el segundo de los síntomas, han llevado a la ciudadanía a estar acorralada y a la necesidad de recurrir a alternativas menos reconfortantes.
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