La Policía de Santa Fe, a través de la Brigada Motorizada de la Unidad Regional II, aprehendió el martes a la madrugada a un automovilista de 30 años tras una persecución controlada por zona norte de la ciudad de Rosario. Durante su trayecto por bulevar Rondeau, el conductor circulaba a alta velocidad y con luces apagadas, incluso lo hizo en algunas calles en contramano. También hizo caso omiso a la orden de detenerse y colisionó contra un vehículo estacionado.
Cerca de la 1.35 horas de la madrugada del martes, personal de la Brigada Motorizada divisó a un Peugeot 207 color gris oscuro mientras circulaba a alta velocidad y con luces apagadas por Rondeau. Al llegar a la intersección con calle República del Líbano se intentó infructuosamente detener su marcha haciendo señales lumínicas y sonoras.
El conductor comenzó entonces con su fuga a gran velocidad por varias calles, algunas en sentido contrario al tránsito vehicular, haciendo caso omiso a las órdenes impartidas. Tras un breve seguimiento controlado, en Rondeau y Olivé colisionó contra un vehículo estacionado, siguiendo su huida por una cuadra hasta que detuvo su marcha en la intersección de Rondeau y Gregoria Matorras.
Allí los efectivos de la Brigada Motorizada lograron identificar al conductor como Lucas Adrián G., quien a pesar de no tener elementos de peligrosidad en su poder, sí se mostraba exaltado y bajo estado de nerviosismo.
Efectivos policiales procedieron a su aprehesión y asimismo se le tomó entrevista a una mujer de 32 años que manifestó ser la propietaria del Chevrolet Agile que estaba estacionado y que resultó dañado por la colisión. El procedimiento continuó en la Comisaría 10ª de la Unidad Regional II.
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