
El caso del avión que cayó en Salta con 364 kilos de cocaína sigue revelando detalles impactantes. La investigación avanza y el viernes 7 de noviembre fueron imputados y se les dictó prisión preventiva a los cinco detenidos: los dos pilotos de la aeronave —ambos de nacionalidad boliviana— y tres presuntos cómplices que actuaron en tierra.
El episodio ocurrió en Rosario de la Frontera, cuando una avioneta tipo Cessna se estrelló y permitió descubrir un importante cargamento de droga. En diálogo con Río 96.9 Extra Primera Mañana, el periodista especializado en temas judiciales Gustavo Carabajal, de La Nación, explicó algunos detalles clave sobre la causa.
“Los paquetes con cocaína eran en forma de ladrillos y tenían una etiqueta que decía ‘Prada Milán’. Es una marca de fantasía que los narcos usan para identificar al dueño o destinatario del cargamento”, detalló Carabajal.
El periodista agregó un dato que refuerza una hipótesis internacional: “Paquetes con esa misma marca fueron hallados en 2022 en México, en un cargamento de 1.600 kilos de cocaína del cartel de Sinaloa. Por eso hay sospechas de que este envío podría pertenecer a esa organización.”
Carabajal precisó que en la zona del accidente se encontraron más de 200 kilos de cocaína enterrados, mientras que el resto estaba en el interior del avión y en vehículos de apoyo. “Había dos autos: un Gol y una camioneta Ford. La avioneta rozó al Gol al intentar aterrizar y se incendió. Los ocupantes de la camioneta rescataron a los del auto, cargaron parte de la droga y huyeron, dejando atrás a los pilotos, que creyeron muertos.”
Sin embargo, los pilotos sobrevivieron y caminaron cerca de 25 kilómetros hasta Metán, donde fueron detenidos luego de que intentaran comprar una bebida energizante con dólares en un kiosco.
“En el camino abandonaron dos GPS de última generación, lo que permitió rastrear la ruta del vuelo”, señaló Carabajal. Durante la entrevista, el periodista recordó que Argentina es un punto de paso y lavado de dinero para distintas organizaciones criminales.
“Nuestro país es tierra fértil para que jefes de carteles de Colombia, México o Brasil vengan a lavar dinero. Se alejan de los combates y buscan tranquilidad”, explicó. Casos como el del Comando Vermelho en Nordelta o la conexión de Mario Segovia con el cartel de Sinaloa refuerzan la preocupación sobre la presencia de redes narco internacionales en territorio argentino.
La Justicia federal continúa analizando los vínculos y la procedencia de la droga, mientras se aguardan peritajes sobre los dispositivos GPS y las comunicaciones interceptadas.
Por ahora, los investigadores sostienen que los cinco detenidos serían solo el eslabón más bajo de una estructura mucho más amplia. “Seguramente estos hombres no tienen idea para quién trabajaban”, concluyó Carabajal.
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