Con la elegancia de París como marco, Roland Garros es sin dudas una de las citas ineludibles cada año para los amantes del tenis. Junto al Abierto de Australia, Wimbledon y el US Open, que también forman parte del clásico Grand Slam, el clásico francés sobre polvo de ladrillo garantiza no sólo los partidos del mejor nivel sino además mucho glamour. En sus canchas brillaron Guillermo Vilas, José Luis Clerc, Alberto Mancini, Martín Jaite o Gabriela Sabatini. El recuerdo de los argentinos no puede obviar a la generación siguiente, con las batallas que protagonizaron David Nalbandian, Mariano Puerta y Juan Mónaco, o la épica final entre Gastón Gaudio y Guillermo Coria. En esa selecta lista de compatriotas que se lucieron en el estadio Phillipe Chatrier también está Javier Frana, campeón del dobles mixto en 1996 junto a Patricia Tarabini y una de las voces destacadas como comentarista televisivo tras su retiro en 1997, que este viernes habló con Río Extra 96.9.
“Si me preguntan por el rendimiento del año, salvo por la lesión y lo que pasó con su etapa de polvo de ladrillo, el que mejor venía era Jannik Sinner. Pero en la carrerita corta de Roland Garros, el candidato es Zverev. Es el que mejor se está mostrando en el torneo, con mayor firmeza y mucha evolución”, comenzó Frana, que llegó a los principales puestos del ranking ATP en la década el ’90 y que tras su retiro en 1997 se convirtió en uno de los principales comentaristas televisivos del circuito.
Después de dos décadas dominadas casi en exclusividad por Federer, Nadal y Djokovic, el tenis mundial pasa por un recambio que tiene a varios candidatos jóvenes a ocupar el trono vacante. Y en ese marco Roland Garros puede ser la vidriera ideal para asomarse a esa nueva realidad, sobre todo para los que no vienen siguiendo el día a día del circuito: “Cada torneo de Grand Slam tiene su propia historia y su motivación. Siempre surgen cosas, alguien que se destaca, algún otro que no cumple con la expectativa previa. Por eso despiertan tanto, e inclusive hay mucha gente que solamente sigue el tenis a partir de estos cuatro grandes torneos o de la Copa Davis”, sostuvo Frana.
Sobre el nuevo presente del tenis mundial, Frana analizó: “Se está dando una combinación. Nadal nos empieza a decir adiós, ya lo hizo Federer y el recambio que se empieza a sentir, con la retirada también de Andy Murray. Este torneo viene a ser el primero que marca el paso del tiempo. Y por otro lado, los jugadores jóvenes a los que se les pone la vara muy alta, para empezar a quienes fueron tal vez los tres mejores jugadores de la historia del tenis y que encima coincidieron en jugar en la misma época. Además, si pasa que alguno de los candidatos tiene alguna lesión o mal rendimiento, se hace más notorio ese vacío”.
En la nota con Sebastián Soso y su equipo de Río 96.9, Frana habló sobre los argentinos que siguen en carrera: “Tomi Etcheverry y Fran Cerúndolo se pararon muy bien ante el cuadro que tenían. Báez también había arrancado con fuerza, pero ayer (en referencia al partido que lo sacó del torneo) desperdició una oportunidad. Tenía un rival accesible, pero a veces cuando jugás a cinco sets, el cansancio o el clima te pueden jugar una mala pasada. Afortunadamente, el tenis argentino muestra que siguen apareciendo nombres: Lourdes Carlé va tomando cada vez más visibilidad, Podoroska sigue prendida en el ranking”.
En la nota con Sebastián Soso y su equipo de Río 96.9, Frana planteó que de ahora en más no hay contrincante fácil para nadie: “Ya en tercera ronda te empiezan a tocar partidos duros, salvo que alguien te haya hecho un favor eliminando a alguno de los rivales top”.
Como cierre de la entrevista, Javier Frana recordó el día en el que levantó el trofeo en Roland Garros, como campeón del dobles mixto: “Fue algo muy especial. No estaba en los planes. Cuando vas jugando y vas escalando, el torneo se empieza a vaciar. Van quedando solamente los que tienen buenos resultados, que suelen ser las grandes figuras del circuito. Entonces, que me haya tocado la posibilidad de jugar la final y ganarla, fue soñado. El mixto además tiene la posibilidad relajada, no tiene el stress del single. Y estás más para el goce que para el padecimiento, con esas emociones que a veces se empiezan a chocar”.
Escuchá la nota completa.
Comentarios