La justicia de Corrientes autorizó una medida cautelar para que los dos integrantes de una pareja que acaba de divorciarse puedan seguir viendo a la mascota que tenían cuando vivían juntos. Se trata de “Pope”, un perro salchicha que fue parte de la petición que hizo una mujer, al separarse de su ex.
A la resolución la firmó una jueza del Juzgado de Familia, Niñez y Adolescencia N°4 de Corrientnes y establece un régimen de visitas y de cuidado “parental” del perro al menos hasta el próximo 7 de marzo de 2024, cuando se haga una audiencia para decidir los derechos de las partes y definir acuerdos.
La decisión es inédita, porque de confirmarse en esa audiencia se trataría del primer régimen de comunicación con un perro que no es parte de un acuerdo de divorcio sino de una demanda de una de las partes. “Esto refleja el cambio de paradigma de la sociedad respecto a las relaciones den la familia interespecie”, celebró el Instituto de Derecho Animal del Colegio de Abogados de Corrientes.
El salchicha que tenía la pareja, ‘Pope’, tiene un año. Después de la separación, la mujer no volvió a verlo y entonces acudió a la justicia para poder volver a a tener contacto con el perro.
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