Una persona murió y otras 30 resultaron heridas después de que un avión sufriera “fuertes turbulencias” en un vuelo que conectaba a la ciudad de Londres con Singapur. La aeronave tuvo que desviarse de su camino y hacer una escala en Tailandia para que los pasajeros pudieran ser atendidos.
“Confirmamos que hubo heridos y un muerto a bordo del Boeing 777-300ER. En total había 211 pasajeros y 18 tripulantes a bordo”, explicaron desde la aerolínea Singapore Airlines a través de un comunicado publicado en sus canales oficiales. Sin embargo, por el momento no se específico si la persona que perdió la vida se trataba de un pasajero o de un miembro de la tripulación.
De acuerdo a las primeras informaciones surgidas, el avión viajaba a una altura aproximada de 11.300 metros cuando quedó en el medio de una tormenta y comenzó a descender de manera repentina. En el lapso de tres minutos, la aeronave bajó más de 2.000 metros, y se quedó a esa altura durante 10 minutos hasta aterrizar en Bangkok.
“Estamos trabajando con las autoridades locales de Tailandia para brindar la asistencia médica necesaria y enviando un equipo a Bangkok para brindar cualquier asistencia adicional necesaria”, indicó la compañía.
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