Una nueva droga llegó al país en un vuelo proveniente de Europa. Allí detuvieron a un hombre porteño donde le encontraron 12 frascos de popper, un euforizante líquido de la familia química de los nitritos. Esta sustancia se inhala para poder tener una potente sensación de ‘subida’, normalmente se utiliza para encuentros sexuales.
No es la primera vez que aparece esta droga en Argentina. A fines de agosto, un empresario fue detenido en la zona primaria aduanera del aeropuerto de Ezeiza. Allí descubrieron que en su valija llevaba 40 de estos frascos en un vuelo que volvía de Nueva York.
Según las primeras informaciones, la Aduana ya incautó 289 frascos de este tipo. El popper se vende bajo la pretensión de ser un limpiador de cuero en pequeños frasquitos de entre 15 a 24 mililitros. Cuesta alrededor de 9,40 euros y contiene distintos aromas para aumentar los efectos y la sensación de placer.
Según algunos usuarios de drogas sintéticas alertaron sobre esta sustancia nueva pero también se lo tomaban a chiste. “Una inhalada profunda y estoy en Broadway. Y más no porque se me revienta la cabeza. Dos seguidas, uno por cada fosa y me voy a Neptuno”, manifestaron.
Esta sustancia tiene efectos adversos como enrojecimiento de la cara y el cuello, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, aumento de la frecuencia cardiaca e hipotensión.
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