La estatua de Lionel Messi ubicada en la esquina de Moreno y Santa Fe, en pleno centro de Mar del Plata, amaneció este domingo completamente destrozada. La figura —que muestra al capitán de la Selección Argentina levantando la Copa del Mundo— fue encontrada con las piernas cortadas y el torso partido, con marcas de fuertes golpes frente al tradicional restaurante y cafetería El Nuevo Mundial.
El ataque fue descubierto durante la madrugada y generó indignación entre vecinos, turistas y comerciantes de la zona. La obra había sido instalada como homenaje tras la consagración en el Mundial de Qatar 2022 y se había convertido en un punto de referencia para visitantes.
El episodio ocurre en un contexto de creciente malestar hacia la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), su conducción y las recientes decisiones arbitrales que generaron polémica tanto en Primera División como en el Ascenso. La tensión aumentó en los últimos días tras la consagración de Rosario Central como campeón por acumulación de puntos y la sanción aplicada a Estudiantes luego del “espaldarazo” en el pasillo en señal de rechazo al club rosarino.
Si bien no existe una vinculación directa entre el vandalismo y este conflicto institucional, el hecho se inscribe en un clima de fuerte crispación en torno al manejo del fútbol argentino y la disputa abierta entre el Gobierno nacional y la dirigencia de la AFA.
Por el momento, no hay detenidos ni sospechosos identificados. Las autoridades municipales analizan las cámaras de seguridad de la zona para intentar determinar quiénes participaron del ataque.
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