El diputado nacional de Juntos por el Cambio Federico Angelini estuvo este pasado lunes en la ciudad de Venado Tuerto donde dejó varias definiciones políticas. Entre ellas, descartó la posibilidad de amar un nuevo frente a nivel provincial y llamó a los partidos de la oposición a sumarse a Juntos por el Cambio.
Consultado sobre el reciente acuerdo entre Nación y el gobierno de Santa Fe por la histórica deuda, pidió a la oposición unirse para denunciar al gobernador por mal desempeño de sus funciones pública. En otro orden, se refirió a la situación nacional y tildó a los últimos acontecimientos como “un golpe institucional de Cristina Fernández”.
Además, Angelini aprovechó su llegada a la localidad del sur santafesino para visitar empresas del sector industrial de la región y luego por la tarde tener un encuentro reservado con el intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella.
En declaraciones a los medios locales, fue contundente: “Nosotros tenemos que consolidar y fortalecer Juntos por el Cambio, que es la coalición que ganó la última elección en la provincia”.
“No encuentro un solo motivo para armar un nuevo frente”, agregó.
En esta línea, continuó: “Es muy probable que, si hacemos las cosas bien, gobernemos a partir de diciembre del 2023. Y en eso tenemos que confluir personas que tengamos más coincidencias que diferencias. Si vos confluís en un espacio político en donde las diferencias sean muy marcadas, te va a pasar lo que está pasando actuamente en lo nacional”.
“Para no hacerle daño a los santafesinos nosotros tenemos que tener más coincidencias que diferencias”. insistió.
También, hizo hincapié sobre los últimos acontecimientos nacionales: “Lo más grave es la incertidumbre que se está generando. Preocupa mucho la poca credibilidad del presidente en toda la sociedad. Batakis va a contramano de lo que necesita el país; está convencida de que la inflación no es consecuencia de un fenómeno monetario y está en contra de los acuerdos multilaterales con el mundo desarrollado“.
Por último, disparó: “Sin dudas que esto fue un golpe institucional. Cristina Fernández está haciendo todo lo posible para que al gobierno le vaya mal. Pero ella es parte del gobierno. Su única obsesión tiene que ver con no ir presa y ella firmó un pacto de impunidad con Alberto Fernández, por lo que está desesperada.
“El primer paso debería ser que tanto el presidente como la vicepresidenta dejen de lado la irresponsabilidad y este jueguito del ´te llamo o no te llamo´“, cerró.
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