Las cámaras empresariales lanzaron hoy una alerta sobre la escasez de combustible que afecta a todo el país. Por otro lado, el ministro de Economía y candidato presidencial, Sergio Massa, respondió a la crisis y señaló que el problema radica en la “acumulación de stock” y no en una demanda mayorista significativa.
El Gobierno había establecido en agosto un congelamiento de los precios de los combustibles en acuerdo con las compañías petroleras, una medida que, según los empresarios del sector, ha generado desabastecimiento y problemas en las estaciones de servicio.
Raúl Castellano, presidente de la Cámara de Empresarios de Combustibles, expresó en Radio Continental: “Está faltando combustible en todo el país. Comenzó faltando gasoil, y ahora falta la nafta súper también. Esto está relacionado con el congelamiento de precios que se ha impuesto hasta noviembre. Las estaciones de servicio vendemos lo que nos mandan las petroleras. No sabemos qué cantidades vamos a recibir el mes que viene”.
La situación se ha vuelto crítica para el sector del transporte, según informó la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac). Varios de los 44 miembros reportaron dificultades, desde limitaciones en las formas de pago hasta la falta de acceso a gasoil tipo 2, esencial para el sector de transporte.
Ante estas preocupaciones, el ministro Massa explicó la situación desde el punto de vista del Gobierno: “La Secretaría de Energía planteó que había dos situaciones, una vinculada al cupo mayorista y otra al minorista. Hay mayoristas que están acumulando stock, y lo que pedimos tanto a YPF como a Axion, que tienen una gran presencia en el interior, es que garanticen el abastecimiento minorista. En este momento no hay una demanda mayorista significativa, sino una acumulación de stock”.
Este conflicto entre el Gobierno y las empresas petroleras ha generado preocupación en toda la comunidad empresarial y, a su vez, ha exacerbado las tensiones en el sector del transporte y las estaciones de servicio. La incertidumbre sobre el suministro futuro de combustible añade una capa de preocupación a la economía del país.
Comentarios