El fiscal Adrián Spelta brindó definiciones este martes sobre el crimen del gendarme Gustavo Elorrieta: “Pudimos acreditar por los testigos que desde el mes de junio venían planificando el homicidio. Presumimos que la ex esposa fue la ideóloga y que habían pensado hacerlo el primer día que llegue a Rosario. Él llegó el 10 de julio. Y los golpes en el cráneo fueron la mecánica del hecho”, señaló
Spelta también confirmó que el gendarme fue muerto a martillazos: “Lo hemos calificado como homicidio con alevosía, porque lo drogaron para que no ofreciera resistencia. No olvidemos que era un hombre de casi dos metros y 130 kilos. Era muy probable que se hubiese resistido. Por eso creemos que lo drogaron primero y después le aplicaron golpes. El primero en el cráneo, con una masa”.
Asimismo, el funcionario del MPA explicó qué podría haber determinado el aberrante plan criminal del gendarme, de parte su propia familia: “El descarte no tenemos en claro qué día fue. Pero puede haber sido en las primeras 48 horas de producido el homicidio. Por eso apareció por un lado el auto que se utilizó para el descarte y luego el cuerpo. Si bien estamos viendo los movimientos bancarios para confirmar qué pasó, la principal hipótesis que tenemos hasta ahora es que la víctima había decidido separarse y construir una nueva familia“.
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