A partir de la revolución sexual que tuvo lugar a mediados del siglo XX, la popularización de esta práctica sexual, ha cobrado protagonismo con el paso de los años y con ellos desmitificado de varios mitos. La práctica sexual mediante la que se estimulan los genitales tanto de una mujer (cunnilingus) como de un hombre (felación) a través de la boca, la lengua y los labios tiene miles de formas de practicarse.
Sin embargo, hay algunas mentiras en torno al sexo oral, que han sido aclaradas por los especialistas. Por eso, en Red Boing develaremos qué hay de cierto y erróneo en cada uno de ellos.
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Mitos
1. No es necesario usar condón
FALSO. Usar un preservativo durante cualquier práctica sexual es fundamental, entre otras cosas, para evitar el contacto con cualquier fluido. De esta manera, se previene el riesgo de contraer alguna infección en la boca, en la garganta o en las partes íntimas.
2. No se contraen infecciones de transmisión sexual a través del sexo oral
FALSO. Practicar sexo oral sin protección aumenta las posibilidades de contraer una infección de transmisión sexual. Investigadores de la Universidad de California han determinado que el riesgo aumenta si alguien con algún corte en la boca practica sexo oral a un hombre. El riesgo de infección también aumenta si hay sangre menstrual o si la pareja tiene alguna ETS (enfermedad de transmisión sexual) o el VIH (virus de inmunodeficiencia humana). Asimismo, también se puede contraer la sífilis (enfermedad infecciosa producida por una bacteria) si se practica el sexo oral sin protección.
3. Cepillarse los dientes antes del sexo oral puede derivar en VIH
FALSO. El VIH raramente se podría transmitir a través de la boca. No obstante, aunque el riesgo de contraer VIH a través del sexo oral no es nulo, es mucho menor que con el sexo anal o vaginal. Además, la saliva contiene una enzima que previene el contagio de esta enfermedad.
4. El jugo de ananá cambia el sabor del semen
FALSO. Si bien es cierto que nuestra dieta puede influir en el sabor de los fluidos corporales, beber zumo de piña justo antes de practicar sexo oral no hace que cambie el sabor del semen. Sin embargo, los líquidos corporales, como el sudor, la saliva, las secreciones vaginales y los líquidos seminales, pueden verse influenciados por la dieta y los hábitos de estilo de vida.
5. A los hombres les gusta hacerlo menos que a las mujeres
FALSO. No es cierto que a las mujeres les guste más realizar sexo oral que los hombres. “Es totalmente indistinto el género, se trata de las personas. Hay a quienes les gusta dar sexo oral y hay otras que no y la verdad es que por lo que yo he estudiado es un juego que se incluye mucho dentro de lo que es el juego sexual. La realidad es que cuando en una pareja dando sexo oral uno ve que el otro disfruta se disfruta también”, argumentó a CONBIENESTAR Viviana Wapñarsky, psicóloga y miembro del servicio de sexología del Hospital de Clínicas.
6. Las mujeres no pueden tener un orgasmo durante el sexo oral
FALSO. Durante algún tiempo se extendió la creencia que las mujeres solo son capaces de llegar al placer máximo a través del coito, cuando en realidad, suele ocurrir más a la inversa. “El orgasmo se desencadena en el clítoris, el cual está totalmente expuesto. Lo que se hace en el sexo oral es estimularlo y justamente el orgasmo se logra por fricción, por lo que lo más probable es que la mujer fácilmente tenga un orgasmo con esta práctica”, indicó Wapñarsky.
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