El juez Hernán Postma dictó prisión preventiva por 90 días a los agresores del hijo de Valeria Mazza y en redes sociales hubo usuarios recordaron criterios muy dispares del cuestionado magistrado, en casos resonantes. Por uno de ellos inclusive llegó a enfrentar un jury de enjuiciamiento: cuando había otorgado la domiciliaria al narco condenado por el ataque a la casa de Antonio Bonfatti.
El recuerdo remite a lo que pasó con Ema “Pimpi” Sandoval, autor en 2013 de los disparos contra el domicilio del entonces gobernador Bonfatti. Tenía además un frondoso prontuario, que se había iniciado a sus 16 años.
En 2018, fue imputado junto a su hermano por una doble tentativa de homicidio. Y es en ese contexto que aparece en escena Hernán Postma. En primera instancia, cuando fue imputado por disparar contra dos jóvenes junto a su hermano, el polémico juez le concedió el beneficio de la alternativa a la prisión preventiva en un departamento en barrio Rucci.
Un año después -en abril de 2019 y ante solicitud de Sandoval de mudarse porque “no se sentía seguro” en su casa en Rucci- el mismo Postma le permite al narco Ema “Pimpi” mudarse a una fastuosa casa en Pago Largo al 600, en el barrio La Florida.
La casa era propiedad del juez de Cámara, Oscar Puccinelli y quien firmó el contrato de alquiler fue Matías Lange, un joven de 24 años que no acreditaba ingresos, para que allí fuese a vivir su amigo que tenía domiciliaria.
Sandoval tampoco podía justificar el pago del alquiler, pero al juez Postma no le llamó la atención. En octubre de 2019, ese domicilio fue atacado y se dio un resonante triple crimen: entre las víctimas estuvo Ema “Pimpi”.
La votación que salvó a Postma
La situación le valió a Postma tener que enfrentar un jury de enjuiciamiento, del que salió airoso cuando por 6 votos 4 se decidió desestimar el pedido del procurador Jorge Barraguirre. La decisión de archivar la solicitud contra el juez fue votada a favor por el presidente de la Corte de Justicia santafesina, Rafael Gutiérrez; los ministros María Angélica Gastaldi, Roberto Falistocco, Eduardo Spuler y Mario Luis Netri, además del senador provincial justicialista Armando Traferri.
Quienes habían votado por el jury a Postma habían sido el ministro de la Corte Daniel Erbetta, el diputado radical Maximiliano Pullaro y los representantes de los Colegios de Abogados de Reconquista y Venado Tuerto, Julio Pagano y Marisa Ferrero, respectivamente. Pero esos cuatro votos no fueron suficientes.
En diálogo con Red Boing, Pullaro indicó: “Entiendo que Postma es un mal juez y quedó demostrado en el caso de la domiciliaria a Ema ‘Pimpi’ Sandoval. Fue blando con un delincuente pesado. Y por eso en el momento que se trató el jury, voté en minoría para avanzar”.
El caso Jaef y las seis bombachas
Antes del caso de Ema “Pimpi” Sandoval, el juez Postma había tenido otra situación por lo menos polémica: en mayo de 2018, se vio al empresario Marcelo Jaef navegando por el Paraná en un yate, cuando debía estar en su casa cumpliendo un arresto domiciliaria por estar imputado en la megacausa por estafas inmobiliarias.
Al trascender la imagen, los fiscales Narvaja y Haurigot solicitaron una audiencia y le pidieron al juez Postma que le sea revocada la domiciliaria a Jaef. Sin embargo, el magistrado ratificó el beneficio para el empresario. Otra vez, un criterio mucho más permisivo que el que tuvo esta última semana con los agresores de Tiziano Gravier.
Por último, un caso en el que el polémico juez volvió a mostrar su faceta más dura. Fue en febrero de este año, cuando un empleado de Seguridad encontró a una joven de 22 años queriendo robar cuatro pares de medias y seis bombachas en el Carrefour de Necochea y 27 de Febrero.
Hubo audiencia imputativa, que también estuvo a cargo de Postma y el juez dictó prisión preventiva a la joven por tentativa de hurto. Sí, el mismo juez que le había concedido el permiso de seguir su condena en una casa al narco Sandoval y que a Jaef le sostuvo el beneficio de la domiciliaria a pesar de haber estado navegando en el Paraná.
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