Televisor a todo volumen, luces apagadas, puertas sin violentar y múltiples heridas de arma blanca. Esos son los datos que permiten reconstruir la escena del crimen de Mélani Juárez, la joven de 21 años que fue asesinada en una pensión de 9 de julio al 500.
Mientras fiscalía trabaja para dar con el celular de la víctima y aguarda por las imágenes de las cámaras de seguridad, los familiares dieron a conocer su hipótesis. De acuerdo con el relato de Magalí, hermana de la muchacha, los residentes del lugar estarían involucrados.
Por su parte, Agustín, el otro hermano, apuntó contra un hombre que vivió en el inmueble durante poco tiempo. Según los datos aportados, pagó un mes pero solo estuvo dos semanas, hasta el domingo pasado.
Ambos coincidieron en que la chica solía mudarse con frecuencia y que era “muy activa” en redes sociales. También, detallaron que poco tiempo atrás había trabajado en una tienda de celulares y que actualmente lo hacía como repartidora en una aplicación.
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