Desde que comenzó la invasión rusa a Ucrania el 24 de febrero de 2022, surgió el nombre de una organización militar que se encarga de enviar mercenarios a territorio ucraniano, para combatir junto a las tropas regulares de Rusia. Se denomina Grupo Wagner y ha participado junto a los rusos en varios teatros de operaciones como Siria, Líbano, Sudán, República Centroafricana y Malí entre otros países.
Origen
Existen una gran cantidad de empresas militares a lo largo de la historia, sobre todo en Estados Unidos y Reino Unido. Tras la caída de la Unión Soviética en 1991, en Rusia comenzaron a surgir estos grupos, debido a la gran cantidad de mano de obra desocupada que quedó del ejército rojo.
El 31 de diciembre de 1999, Vladimir Putin asumió como presidente de Rusia y comenzó una política exterior mucho más agresiva que su antecesor, Boris Yeltsin, por lo que estos grupos comenzaron a tener mayor participación en conflictos armados afuera de la frontera del gigante bicontinental.
El Grupo Wagner fue fundado por Dmitri Utkin, veterano de la guerra de Chechenia y agente del Departamento Central de Inteligencia del Kremlin. Algunos analistas internacionales sospechan que el nombre fue adoptado por Richard Wagner, el músico alemán predilecto de Adolf Hitler.
Comienzo de las operaciones militares
El bautismo de fuego fue en 2014 cuando aparecieron en la península de Crimea tomando lugares estratégicos y participando de la anexión de ese territorio, que pertenecía a Ucrania, pero que quedó de facto en manos de los rusos. Meses después fueron visto en la región del Donbás, iniciando los primeros ataques contra las fuerzas leales a Kiev.
En Europa y Estados Unidos elaboraron dos teorías sobre el funcionamiento de los Wagner, la primera es que depende totalmente del Kremlin y que tiene el estatus de empresa privada para que Putin pueda tener un ejército irregular que combata con mayor libertad que las tropas regulares. La segunda teoría es que verdaderamente son independientes pero que que su principal cliente es el estado ruso.
Yevgeny Prigozhin, es uno de los oligarcas más preponderantes de Rusia y financista principal del Grupo Wagner. Sería utilizado para brindar seguridad en aéreas estratégicas de las empresas rusas, además de encargarse de la seguridad personal de los hombres de negocios más poderosos de ese país y además de realizar trabajos de inteligencia.
Experiencia en Asia y África
El Grupo Wagner se destaca por apoyar tácticamente y logísticamente a las fuerzas rusas en el extranjero, adiestrar a las tropas y realizar operaciones clandestinas que no puede realizar un ejército regular.
En Siria se dedicaron a entrenar a las tropas leales a Bassar Al Assad y participando en combates como el de Latakia, Alepo, Homs y Damasco. Su principal enemigo, además de los disidentes al presidente sirio fueron los combatientes del Ejército Islámico, con quienes protagonizaron grandes batallas en ese país.
En África han tenido actuaciones destacadas en diversos escenarios, ya que se sumaron a la estrategia de Rusia de sumar aliados contra el mundo occidental en todos los contenientes. En Libia apoyaron al General Haftar, quién se enfrentó al gobierno patrocinado por Estados Unidos e incluso brindaron apoyo militar en algunos combates urbanos.
En Siria y Libia se han quedado con varios pozos petroleros que sirven para su financiación.
En Sudán, defendieron al gobierno que era jaqueado por su ejército y gracias a ese apoyo, Rusia obtuvo acuerdos comerciales beneficiosos y la posibilidad de instalar una base militar en el mar Rojo.
En la República Centroafricana, que está inmersa en una cruenta guerra civil, los Wagner intervinieron a favor del gobierno y las empresas rusas se instalaron en la zona para explotar minas de oro y diamante.
Ucrania
En Ucrania están llevando a cabo la misión más compleja de su historia. Desde el inicio de la invasión, medios estadounidenses informaron que Putin envió a Kiev a soldados de Wagner a terminar con la vida del mandatario ucraniano Volodmir Zelenski, sin embargo nadie se atrevió a confirmar esa noticia.
Lo que está confirmado es que entraron a territorio ucraniano desde Bielorrusia con la intención de tomar su capital y se estima que fueron responsables de hechos aberrantes como la matanza de Bucha. En esta guerra han sufrido de miles de bajas que son compensadas por soldados de menor calidad que cobran hasta 3000 euros por mes para estar en el frente.
Incluso se filtraron videos de reclutas de Wagner en cárceles rusas ofreciendo la libertad definitiva a reclusos a cambio de servir 6 meses en Ucrania. Sin embargo, el Kremlin se negó a reconocer al grupo como parte del estado ruso.
Tras la decisión rusa de replegarse en el Donbás, este grupo mercenario se instaló en la zona de Popasna desde donde desarrolló varias ofensivas entre las que se destaca la batalla de Soledar donde finalmente los rusos tomaron la ciudad desde donde asedian Bakhmut, un lugar táctico clave para los invasores.
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