El gobernador Maximiliano Pullaro encabezó el acto de apertura del Encuentro de Trabajo Interprovincial “Prevención de siniestros viales en conductores profesionales”, que se desarrolló en el Salón Blanco de la Sede de Gobierno. De la actividad participaron también la vicegobernadora Gisela Scaglia y el titular de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV), Carlos Torres, junto con autoridades de las áreas de Seguridad Vial de los gobiernos provinciales que conforman la Región Litoral y la Región Centro.
Durante el encuentro se brindó un informe acerca de alcoholemias en conductores profesionales, se trabajará sobre una propuesta de la APSV para el abordaje junto con el Sindicato de Camioneros de Santa Fe y en coordinación con las otras provincias, así como también una propuesta de operativos limítrofes entre provincias; entre otros temas.
En conferencia de prensa, el gobernador de Santa Fe volvió a marcar diferencias con el Gobierno nacional en relación a la política agropecuaria y la baja de retenciones. Si bien reconoció que se trata de una medida que puede traer cierto alivio al sector, advirtió que responde a un contexto electoral y no a un plan de previsibilidad para los productores.
“Desde el primer momento dijimos que aumentar las retenciones era un error. Hoy celebramos la reducción, pero necesitamos que no sea una medida coyuntural ni electoral, sino una política estable que dé previsibilidad a los productores”, señaló el mandatario.
Además sostuvo que la decisión oficial beneficiará principalmente a los grandes productores, que aún tienen un porcentaje de la cosecha guardada y podrían liquidar entre un 20% y un 30%. Sin embargo, aclaró que los pequeños y medianos ya vendieron su producción y no podrán aprovechar el esquema. “El campo necesita reglas claras para proyectar su trabajo e invertir”, remarcó.
Pullaro también vinculó el anuncio con la necesidad del Gobierno nacional de conseguir dólares en medio de la pérdida de reservas y la presión cambiaria. “Lo que pasó la semana pasada fue claro: se vendieron 1.100 millones de dólares para contener el dólar y evitar que eso se traslade a la inflación. El campo es la vía más rápida para que ingresen divisas, pero el trasfondo es económico y electoral”, evaluó.
En ese marco, advirtió sobre el impacto que las decisiones macroeconómicas podrían tener en los precios internos. “Ya están llegando listas con aumentos a los comerciantes y eso va a golpear en la inflación. Valoramos la baja de la inflación, pero necesitamos también una baja en la tasa de interés para que haya inversión productiva”, expresó.
Subrayó que la falta de confianza política es otro de los obstáculos para atraer inversiones, incluso después de la aprobación de leyes como la Ley de Inversiones RIGI. “Lo que se necesita no son vetos en el Congreso, sino votos. Eso significa más diálogo político, que hoy no existe en el país”, afirmó.
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