La remontada era casi imposible. Tras la ida en el Camp Nou donde el Paris Saint Germain de Mauricio Pochettino logró un 4-1 casi lapidario, este miércoles se jugó el partido de vuelta en el Parque de los Príncipes. A pesar del buen partido jugado por el equipo español, el resultado final fue 1 a 1 y boleto a cuartos de final para los parisinos.
El encuentro tuvo la misma temática durante los 90’. El Barcelona manejó la pelota con un muy buen partido de Antoine Griezzman. Sin embargo, un error de la defensa puso arriba al PSG. Mientras un centro de Mbappe era fácilmente controlado por Ter Stegen, Lenglet pisaba involuntariamente en el área a Icardi. El árbitro no lo vio, pero el VAR sí. Al francés que anotó un triplete en la ida no le importó y sometió al arquero alemán de penal a los 30’ del primer tiempo.
Cuando parecía partido liquidado para los parisinos, Messi sacó a relucir toda su categoría. A los 35’ del primer tiempo tomó la pelota en ¾ de cancha y con un zapatazo dejó sin respuesta al tico Keylor Navas. Empate parcial y final abierto. Más aún cuando en los últimos minutos de la primera etapa, Kurzawa le dejó la plancha a Griezzman, quien cayó en el área. Del penal que cobró el referí Antony Taylor se hizo cargo el rosarino, pero esta vez el arquero del PSG se hizo gigante y desvió al travesaño con una pierna.
El Barcelona no bajó los brazos, pero no pudo revertir el resultado final. Así, los de Mauricio Pochettino siguen en carrera en busca de la tan ansiada Champions. En la temporada anterior, con Tuchel en el banco llegaron a la final pero perdieron ante el poderoso Bayern Munich.
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