La tensión entre Estados Unidos y Venezuela alcanzó un nuevo pico tras el bloqueo de petroleros y ataques a lanchas en el Caribe. En diálogo con Sergio Gómez Quintana por Radio Boing, el analista internacional Ignacio Montes de Oca explicó que esta vez la Casa Blanca apunta directamente al corazón económico del chavismo: el 95% de las divisas que recibe el Estado venezolano quedó bajo interdicción.
Actualmente, Estados Unidos prohíbe la navegación del 80% al 85% de la flota petrolera venezolana. La empresa norteamericana Chevron quedó como la única autorizada para transportar el crudo. Ante esto, Nicolás Maduro ordenó a su Armada escoltar los buques embargados, aunque Montes de Oca calificó la medida como ineficaz. “Son apenas un par de patrulleros sin ninguna posibilidad frente a los destructores y portaaviones estadounidenses”, sentenció el experto.
Más allá de la pelea por el petróleo, que le reporta a Venezuela unos 25.000 millones de dólares anuales, el analista destacó el peso de las actividades ilegales. Según investigaciones independientes, el tráfico de cocaína, oro y el contrabando le generan al régimen otros 10.000 millones de dólares al año.
Montes de Oca detalló el funcionamiento del denominado “Cártel de los Soles”:
-
Liderazgo: El especialista vinculó directamente a Maduro, Diosdado Cabello y Padrino López con el tráfico de 250 toneladas de cocaína anuales hacia EE. UU. y Europa.
-
Vínculos narcos: Las fuerzas armadas venezolanas participarían en connivencia con las FARC y otros grupos para operar en la zona occidental del país.
Pese a las amenazas de Donald Trump sobre una intervención militar, Montes de Oca pidió cautela. Explicó que el presidente estadounidense tiene permiso del Congreso para operativos antidrogas, pero una invasión o ataque directo al Palacio de Miraflores requeriría una rendición de cuentas mucho más estricta bajo la ley de guerra de 1973.
“Mucho de lo que vemos es para los portales y las pantallas, pero el problema es político y social”, analizó el invitado. Para el analista, la caída de Maduro no garantiza el fin del régimen, ya que el chavismo construyó una estructura dictatorial durante 25 años que no depende de una sola figura. Además, criticó la falta de apoyo real de la comunidad internacional hacia la oposición venezolana, señalando que muchos jerarcas chavistas viven con total tranquilidad en barrios exclusivos de Buenos Aires o Nordelta sin que nadie toque su fortuna.

Comentarios