Facundo es un adolescente de 15 años oriundo de Neuquén que recibió este fin de semana una feroz paliza por parte de sus compañeros de equipo luego de errar un penal durante un partido de fútbol. Como consecuencia de los golpes debieron extirparle el bazo y aún permanece internado.
Todo sucedió en una cancha de fútbol del barrio Valentina Sur, en Neuquén. La riña comenzó luego de que el error de Facundo llevara a la derrota del equipo. Inmediatamente, fue atacado por sus compañeros a raíz del hecho. Se cree que participaron tres menores de su grupo y un adulto de 18 años.
En un principio volvió a su casa sin sentir las consecuencias de la paliza que surgieron algunas horas después cuando la familia decidió internarlo. Fue ahí que los médicos descubrieron el grave daño que había sufrido.
En diálogo con el diario local LM de Neuquén su tío expresó: “Quedó internado y más tarde lo derivaron por una hemorragia interna. Los golpes que recibió le provocaron la rotura del bazo. Supuestamente estaba estable y después a la madrugada dijeron que lo iban a operar de urgencia porque estaba con taquicardia y se podía morir. Le daban una patada más y lo mataban”, explicó.
Lo cierto es que tras el episodio se hicieron denuncias cruzadas entre los padres de la víctima y los victimarios que afirman haber recibido amenazas por parte de la familia de Facundo. El caso recayó en el fiscal de Delitos Juveniles, Germán Martín, quien en diálogo con LM de Neuquén relató:
“Estaban jugando un grupo de chicos de entre 13 y 15 años, y parece que la víctima erró un penal, empezaron a discutir, a pelearse entre ellos, se metió un adulto también a defender a sus hermanos. No fue una agresión de 3 a 1, fue una pelea en circunstancias del partido con la desgracia que le lastimaron el bazo. Se conocían entre todos e iban con frecuencia a jugar a esa canchita”, afirmó.
Facundo aún se encuentra internado, evolucionando favorablemente y recuperándose de la intervención quirúrgica. Aún así, su familia no encuentra respuestas para lo que ocurrió. “No le pueden arruinar la vida a un chico que no hacía nada malo”, afirmó Quesada.
Sus familiares y amigos organizaron una marcha en la ciudad de Neuquén para exigir justicia. Cuando reciba el alta, los investigadores a cargo de la causa buscarán determinar cuál fue el rol de cada uno en la riña. De todas formas, la mayoría de los involucrados son inimputables por ser menores de edad. El único mayor involucrado quedó a disposición de la Justicia.
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