Argentina adquirió 22,4 millones de dosis de la vacuna de AstraZeneca y todavía no se entregó ninguna dosis. Con esta situación y con la demora en la llegada de inoculantes rusos y chinos, el Gobierno Nacional le marcó la cancha este miércoles a los desarrolladores del antídoto que contó con la participación de la universidad de Oxford y consultó las razones del faltante.
“Mantuvimos un nuevo encuentro con el presidente de AstraZeneca Argentina y representantes de la firma para pedirles que a la brevedad informen sobre las eventuales dificultades que atraviesa el proceso de producción de la vacuna y los tiempos en que podrá iniciar la recepción de las dosis que Argentina ha adquirido según el contrato firmado en noviembre del año pasado ya que esta información es vital para la organización de la campaña de vacunación”, indicó la ministra de Salud Carla Vizzotti al término del encuentro.
Alberto Fernández se refirió a este problema el sábado pasado y afirmó que esperaba que AstraZeneca “empiece a cumplir sus compromisos con América Latina”. En ese sentido, comentó que tuvo “una comunicación con el CEO de esa empresa” (el francés Pascal Soriot) y que le expresó su “malestar” por el retraso en la llegada de esas vacunas contra el coronavirus. “Argentina produjo 30 millones de principios activos y no ha vuelto la cantidad de vacunas que se comprometieron a traer”, aclaró.
Hasta el momento, de esta fórmula solo han llegado dosis provenientes del mecanismo Covax. Así, arribaron al país 218.400 dosis el 28 de marzo y el siguiente cargamento fue el 18 de abril con otras 864.000. No obstante, las más de 22 millones que firmó la Argentina con AstraZeneca corresponden a otros cargamentos de los que aún no ha llegado ni una vacuna.
Del cónclave de este miércoles participaron la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, acompañada por la asesora presidencial, Cecilia Nicolini, y el presidente de AstraZeneca, Agustín Lamas, junto a Germán de la Llave y Verónica Aguilar.
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