El senador provincial Lisandro Rudy Enrico, indicado en una causa por juego clandestino en Santa Fe y partícipe fundamental de que Armando Traferri no pierda sus fueros ante la Justicia, pidió derecho a réplica para explicar los motivos de una fotografía en la que se lo ve cenando con Rafael Gutiérrez. Es por eso que el funcionario tuvo un intercambio de ideas con Nacho Russo, en Todo Pasa por Radio Boing.
A pesar de que solamente tiene 46 años de edad, Enrico ocupa cargos públicos en el Estado desde el año 1999, cuando solamente tenía 24 años. Aunque tiene más de dos décadas cobrando abultados sueldos gracias a los aportes de los ciudadanos santafesinos, el legislador parece desconocer la que sucede en el territorio que dice representar.
Con diez años interrumpidos en el Senado de Santa Fe, y con un recibo de sueldo que ronda los 300.000 pesos mensuales, el funcionario radical pero encolumnado bajo las filas de Frente Progresista Cívico y Social no está al tanto de los motivos que llevaron a miles de rosarinos a pedir justicia al Monumento. Además de dejar al desnudo su falta de tacto, el político tampoco tuvo altura para discutir, y a los pocos minutos comenzó a insultar.
Pero la falta de información sobre el doloroso crimen de Joaquín Pérez no es la única prueba del nivel profesional de Enrico, si no que también se opuso al pedido de desafueros para Armando Traferri. Ni siquiera votó negativamente, si no que no tuvo el valor de emitir su opinión y se terminó absteniendo.
Incluso, Enrico admitió que todos los gastos que él tenga, así como también el costo de las líneas de telefonía móvil como la movilidad y el sueldo de sus asesores corren por parte del Estado. Sumado a su salario, los ciudadanos terminan aportando grandes importes en funcionarios que, según el propio Senador destacó, trabaja en el asfaltado de calzadas de algunas localidades pertenecientes al departamento General López.
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