El senador departamental por San Lorenzo, Armando “Pipi” Traferri, volvió a caer en el papel del denunciado-denunciador. En su búsqueda por no ser investigado en el marco de la causa que sigue los pasos del juego clandestino en el sur de Santa Fe, el legislador acusó a los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra de investigar clandestinamente su teléfono.
Rápidamente llegaron los repudios para el senador provincial, e incluso desde el Ministerio Público de la Acusación hicieron saber su solidaridad para con los fiscales. Es por eso que en las últimas horas, Schiappa Pietra agradeció los mensajes recibidos, pero avisó que no claudicarán en su investigación y seguirán adelante tras los pasos del funcionario.
“Con Matías Edery agradecemos el apoyo de quienes hicieron público el repudio a los intentos de impedir la investigación con métodos intimidatorios. ¡Seguiremos adelante! Contamos un ustedes, dirigentes, fiscala/es, Asociación de Fiscales, Colegio de Magistrados, periodistas y amigues. ¡Muchas gracias!”, escribió en sus redes sociales Luis Schiappa Pietra.
“Respecto del contenido de la denuncia, estamos muy tranquilos porque no tiene ningún tipo de apoyaturas legales. Es una situación que me parece que no tiene ningún sentido”, destacó el fiscal en diálogo con RedBoing. Y añadió: “Obviamente no hicimos espionaje ilegal, por la sencilla razón de que no lo intervenimos nunca ni lo habríamos hecho por los fueros. Estamos muy lejos de haber cometido algo así”.
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