El Olímpico Football Club de Villa Gobernador Gálvez lucha por seguir en pie. A poco de cumplir 79 años, atraviesa un momento crítico tras perder un juicio laboral, que como paradoja para una institución que supo ser insignia en la región por el boxeo, la tiene contra las cuerdas.
Declarados en 2018 como patrimonio de la localidad, el Juzgado laboral Nº 6 determinó el remate del edificio de calle Mitre 1149 a partir de una deuda que asciende a unos 5 millones de pesos. Por este motivo, este viernes a las 20 horas se llevará a cabo un abrazo solidario a la institución.
Pero el conflicto data de tiempo atrás. Daniel Cantero, presidente de Olímpico Football Club: “El juicio que afronta el club empezó en el 2011, cuando estuvo la última comisión. Después, la institución quedó acéfala hasta 2015. Este hombre era un miembro de esa comisión, él se desempeñaba dando clases de una disciplina”.
En este marco, el mandatario reveló que al morir quien en aquel entonces auspiciaba como presidente, el demandante comenzó con las medidas judiciales reclamando ser empleado del club. “Al no haber quien le respondiera, en 2014 ganó el juicio. Cuando llegamos en 2015, comenzamos a remontar la institución, pudimos poner en orden los balances y lo edilicio. Pero con él no pudimos coordinar, nunca quiso arreglar”.
“Nosotros sabíamos que algún día íbamos a tener que responder por ese dinero, a pesar de ser un conflicto heredado del pasado”, afirmó a RedBoing. Sin embargo, la pandemia fue un recto al mentón del Olimpia. Sus puertas quedaron cerradas por un año y medio, donde no pudieron cobrar cuotas societarias y debieron mantenerse con un fondo entregado por el municipio de Villa Gobernador Gálvez.
El fallo del Juzgado laboral Nº 6 determinó que el 19 de octubre próximo se lleve a cabo el remate de 3 lotes donde existe el club, de donde se sacarían los fondos para cubrir el juicio de este hombre. “Contamos con el apoyo del intendente y los concejales de la ciudad. La idea del abrazo solidario es lograr repercusión y una ayuda desde más arriba”, concluyó esperanzado con ser salvados por la campana.
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