
Este 26 de agosto en toda la Argentina se celebra el Día del Vacunador en conmemoración del nacimiento del doctor Albert Sabin, creador de la vacuna oral contra la poliomielitis paralítica. Noventa años más tarde, más de 500 voluntarios trabajan en los distintos centros de vacunación de la provincia de Santa Fe para combatir la pandemia del coronavirus.
María de la Riestra es enfermera de la Cruz Roja y vacunadora en la Ex Rural. La mujer comenzó en febrero inoculando a los adultos mayores residentes en geriátricos y desde marzo se encuentra en el centro ubicado sobre el Bv. Oroño en la ciudad de Rosario.

En diálogo con Todo Pasa de Radio Boing destacó que “es incontable la cantidad de personas que vacuné. Trabajamos 6 días por semana, en los que ponemos de 50 a 120 vacunas por jornada”. En ese sentido, dio cuenta de la gestualidad de los pacientes cuando llega el momento de recibir sus dosis.
“La gente está muy agradecida, muy emocionada. Aunque también están los que se resisten, los más jóvenes tienen miedo al pinchazo”, reveló a Nacho Russo. Y destacó: “Hubo personas a las que se les bajó la presión. Es gracioso, porque hay algunos que están todos tatuados y les da miedo. Pero creo que se impone la situación, no solo la aguja”.

“Para nosotros todo esto es un sueño. Vengo trabajando en vacunación desde antes de la pandemia y cuando llegaban las vacunas me anote para sumarme. Más allá de eso, no quería quedarme afuera. El espíritu que nos mueve a todos es aportar nuestro granito de arena. No nos obliga nadie, lo hacemos porque queremos y estamos convencidos de que es la solución”, concluyó con alegría.
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