La farmacéutica estadounidense Merck (cuya filial en Europa es MSD) ha pedido a las agencias reguladores del medicamento autorización para comercializar el primer medicamento en pastillas contra la covid.
Se trata del molnupiravir, un antiviral que ha conseguido reducir a la mitad los ingresos en hospital, tal como demuestran en sus ensayos clínicos.
Lo más interesante es que estos resultados se han constatado especialmente entre las personas de más riesgo. Contagiados que tenían además obesidad, problemas cardiovasculares o diabetes.
En los ensayos participaron 775 adultos con alguna de estas patologías y que tenían síntomas de covid leve o moderada. Se les dividió en dos grupos, y a uno se le dio placebo y, si ingresaban, otros tratamientos.
- A los cinco días de tomar el molnupiravir un 7,3% tuvo que ingresar en el hospital. Y ninguno de los ingresados murió.
- En el grupo que fue tratado con placebo y otros medicamentos hubo un 14% de ingresos y ocho pacientes fallecieron.
“Hemos superado lo que esperábamos en los análisis”, anunció el doctor Dean Li, vicepresidente de Merck.
Por eso la farmacéutica ha pedido a las administraciones una aprobación de urgencia, convencida de que pueden salvar vidas gracias a esta actuación temprana.
“Este es el primero de un arsenal de fármacos orales que esperamos en los próximos meses” ha explicado el doctor Roger Paredes, jefe del servicio de Enfermedades Infecciosas del hospital Hermanos Trias de Badalona.
Ya hay otros medicamentos que se utilizan y han mostrado incluso más eficacia que ese 50% del molnupiravir:
- Con el remdesivir la reducción de riesgo es del 87%.
- Los diferentes fármacos monoclonales están en torno al 80%.
La diferencia es que estos medicamentos son por vía intravenosa, se inyectan. Se han de administrar en hospitales. Pero ya están en marcha también versiones en pastillas.
Con el remdesivir habrá versión oral muy pronto y Pfizer y Roche también están acabando sus antivirales en pastillas.
“Todos estos fármacos nos permitirán tratar la covid en unas fases muy tempranas y evitar complicaciones”, ha dicho el doctor a la emisora Rac1.
Esto no sustituye la vacunación. Los médicos insisten en que confiar todo a los tratamientos una vez contagiados es jugar a la lotería.
Ya se ha visto que el pronóstico de pacientes graves es mucho peor entre los no vacunados que entre los vacunados.
Además, la vacuna es mucho más barata y accesible a todas las poblaciones que el tratamiento con fármacos.
“Estos medicamentos serán muy útiles sobre todo en pacientes de riesgo en que el sistema inmunológico esté más débil y baja la efectividad de la vacuna”, ha añadido el doctor Paredes.
Es decir no serán medicamentos de consumo general, como puede ser un analgésico al coger una gripe. “Seguramente se recetarán a personas muy seleccionadas”, ha aclarado el doctor.
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